Sólo pido desconectar...

Es la segunda entrada de hoy y con tan poca diferencia de tiempo, pero necesitaba escribirla.
Hace un tiempo en el anterior No entiendo os comenté que algo gordo se estaba preparando pero que no era el momento de comentarlo.

Todo un proceso largo, duro e incomprensible por muchas partes. Todo por la maldita herencia recibida y la supuesta mejora del futuro. Malas situaciones, malas caras, incluso insultos. Viva la comprensión de la gente. Viva el ser "todos uno". Mucho se ha hablado, para después triunfar la cobardía. Y es que a veces se hace tan difícil mantener la coherencia, soportar la carga de la responsabilidad de la que otros carecen. Ser tú quién hace lo que debe hacer, sin recibir recompensa. Pero eso da igual, al final es el todo el que acaba pagándolo.

Hace nada se ha producido una de las peores noticias que nos podíamos llegar a imaginar. Cuando he tenido noticia sólo podía sentir rabia, indignación. Una incredulidad que atravesaba fronteras, no podía ser. Falta la confirmación, falta el sí definitivo, que es precisamente lo que no me deja hablar de más. Espero que todo se solucione, pero estoy HARTO. Y no lo hará. Súmale todo el estrés acumulado de todo lo que hay que hacer, al tiempo, a mi dolor de espalda. Vorágine de sentimientos de rabia en mi interior...¿por qué?

Espero que pronto podáis saber de qué se trata y siento haberos tragado esto. Hay que decir que no es nada personal, aunque como si lo fuera. Necesito desconectar. Probablemente esta Semana Santa me vaya a tumbarme a la playa, a escuchar el sonido del mar y coger un poco de VitD. Me iba por algunos a los que quiero, ahora lo hago por mi propia necesidad.

DESCONECTAR...